COLIMAMEDIOS
A 3 días de que inicie la ley de salud, que promete abatir costos y ampliar la cobertura, el presidente de EU, Barack Obama, arremetió ayer contra republicanos y sus aliados que intentan abortar la reforma.
El Presidente advirtió que la más mínima dificultad para implementar esta nueva ley de salud, particularmente en estados gobernados por republicanos, será aprovechada por la base conservadora.
La intención es abrogar una ley que, aunque imperfecta, es la mejor apuesta para extender la base de cobertura y evitar el colapso financiero del sistema de salud.
“Mientras yo sea Presidente no podrán evitar que entre en vigor”, advirtió Obama en un acto en el que acusó a los conservadores de echar mano de esfuerzos irresponsables para descarrilar esta ley, el más importante legado de su Presidencia.
“Si no fuera porque son una locura, sus argumentos para repudiar la ley de salud serían divertidos”, señaló Obama en alusión a las acusaciones lanzadas por republicanos para comparar a la nueva ley de salud con el régimen de esclavitud.
El miércoles, el senador republicano por Texas, Ted Cruz, habló durante 21 horas en un intento infructuoso por evitar que la mayoría demócrata contara con el tiempo suficiente para enmendar la nueva ley presupuestaria.
La reacción de Obama no se hizo esperar y ayer se dirigió a un auditorio compuesto por jóvenes, que se congregaron en la localidad de Largo, Maryland, para arremeter contra esa base del Movimiento del Tea Party.
“¿A qué le tienen miedo los republicanos? preguntó el Presidente al insistir en que, a partir del próximo 1 de octubre, millones de ciudadanos podrán acceder a un seguro médico a través de internet.
“Será como reservar un hotel o comprar algo en Amazon. Y, además, en algunos casos, muchos de ustedes podrán encontrar seguros médicos que les van a costar menos que lo que pagan mensualmente por su teléfono”, señaló Obama.