COLIMAMEDIOS
WASHINGTON,- El presidente Barack Obama afirmó que los programas de espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad son legales y transparentes, aunque se autorizaron en secreto.
«Son transparentes», le dijo Obama a Charlie Rose, conductor de un programa de la cadena de televisión pública PBS, en una entrevista a transmitirse el lunes.
«Por eso tenemos el tribunal FISA», agregó, refiriéndose a una corte secreta nacida de la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera (FISA, por sus siglas en inglés), que autoriza dos programas que acaban de ser identificados por el público: uno que recopila registros telefónicos estadounidenses y otro diseñado para rastrear la pista al uso de servidores de internet en Estados Unidos por parte de extranjeros con posibles vínculos terroristas.
La ubicación del tribunal FISA es secreta y éste sesiona a puerta cerrada. En las audiencias sólo están presentes abogados del gobierno y las órdenes que resultan de las mismas son secretas.
«Vamos a tener que encontrar formas de que el público tenga la seguridad de que hay medidas de supervisión… de que no estamos escuchando sus conversaciones telefónicas; que no se están leyendo sus mensajes de texto, que sus correos electrónicos no están siendo leídos por algún ‘big brother’ en alguna parte», dijo Obama.
El presidente está en Irlanda del Norte para la reunión del G8. La llegada del mandatario coincidió con la revelación de la serie más reciente de artículos del periódico británico The Guardian sobre filtraciones, que alegan que el servicio de supervisión de comunicaciones de Gran Bretaña (GCHQ, por sus siglas en inglés) penetró repetidas veces los teléfonos y mensajes electrónicos de diplomáticos extranjeros con ayuda de Estados Unidos en un esfuerzo por conseguir ventaja en negociaciones muy importantes.
Las palabras de Obama siguen a una conversación en internet el lunes por parte de Edward Snowden, el hombre que filtró documentos que revelaron el alcance de los dos programas a los periódicos The Guardian y The Washington Post. Snowden acusó a legisladores federales y funcionarios del gobierno de exagerar el éxito de los programas de recopilación de información electrónica, como el arresto de Najibula Zazi, quien supuestamente planeaba colocar una bomba en el metro de Nueva York en 2009.
Snowden dijo que a Zazi lo hubieran podido capturar con programas de vigilancia más específicos y de menor alcance, algo que Obama reconoció el lunes en la entrevista, en la que no mencionó a Snowden.
«Es posible que lo hubiéramos podido capturar de otra manera», dijo Obama. «Pudiéramos haber desarticulado el plan porque un policía de Nueva York que lo vio lo consideró sospechoso. Quizás hubiera resultado ser un incompetente y la bomba no hubiera explotado. Pero con estos programas (de recopilación de informaciones electrónicas) estamos aumentando nuestras probabilidades de evitar una catástrofe de ese tipo».
Obama también le dijo a Rose que quería alentar un debate nacional sobre el equilibrio entre la privacidad y la seguridad nacional, un tema renovado luego de las revelaciones de Snowden.
El presidente, quien repitió aseveraciones de que los programas son una herramienta legítima contra el terrorismo y que son completamente no invasivos para personas que no tengan vínculos con terroristas, dijo que ha creado una junta de supervisión sobre privacidad y derechos civiles.
«Me reuniré con ellos. Y lo que quiero que hagan es crear y estructurar un diálogo nacional, no sólo sobre estos dos programas, sino también sobre el problema general de la recopilación masiva de información, porque eso no va a estar restringido a entidades del gobierno», dijo