El costo de construir el estadio de la Copa del Mundo en Brasilia casi se ha triplicado a 900 millones de dólares en fondos públicos debido en buena medida a que se inflaron las sumas mediante facturas falsas, afirman auditores del Gobierno. Ese aumento de costos lo convierte en el segundo estadio de futbol más caro del mundo, a pesar de que la ciudad no tiene siquiera un equipo profesional de envergadura.
El estadio Mané Garrincha, con 288 enormes pilares de cemento que sostienen un techo de alta tecnología que se limpia solo, es el proyecto más costoso del Mundial de Brasil, que generó 11.500 millones de dólares en gastos. Sus críticos lo describen como el ejemplo más acabado del despilfarro y la mala administración, por no decir cosas peores.
Ahora, un análisis por parte de The Associated Press de la información en poder del principal tribunal electoral de Brasil muestra un aumento estratosférico de las contribuciones de campaña por parte de compañías que han ganado la mayoría de los contratos de proyectos de la Copa del Mundo. El principal constructor del nuevo estadio de Brasilia multiplicó por 500 sus donaciones en las más recientes elecciones.
Los vínculos entre las firmas de la industria de la construcción y los políticos no hacen sino agravar las sospechas entre los brasileños de que la gran fiesta del fútbol está machada por la corrupción. Y plantean interrogantes sobre si los políticos que se benefician de las generosas contribuciones de estas firmas pueden realmente supervisar los gigantescos contratos de más de mil millones de dólares relacionados con el Mundial. La rabia por lo que se percibe como corrupción ayudó a alimentar las masivas protestas del año pasado, y hay temores de que el malestar pueda arruinar el Mundial.
En un informe de 140 páginas sobre el estadio, los auditores hallaron unos 275 millones de dólares en presuntos excesos de facturación. Y eso que han examinado solo tres cuartas partes del proyecto. Pronostican que una tercera parte de los costos se pueden atribuir a sobreprecios, la mayor porción de los 500 millones en gastos sospechosos que los auditores han alertado en relación con proyectos de construcción del Mundial hasta el momento.
Los fiscales federales dicen que no hay nadie, ni individuos ni empresas, que esté siendo juzgado por corrupción asociada a la Copa del Mundo, pero podrían pasar años antes de que concluyan las auditorias oficiales.
SABER MÁS
Se genera desconfianza
Las sospechas de irregularidades, no obstante, abundan en Brasil, donde una encuesta realizada el año pasado indicó que tres cuartas partes de los consultados piensan que hay corrupción en las obras del Mundial.
Esas sospechas alimentaron protestas generalizadas y a menudo violentas en junio pasado y movilizaron a más de un millón de personas durante la Copa Confederaciones del año pasado.
Gastos excesivos, a cuenta del erario
BRASILIA.- Sólo el costo de construir o remodelar los 12 escenarios se ha casi cuadruplicado con respecto a los cálculos iniciales, lo que ha convertido el de Brasil en el Mundial más costoso hasta la fecha.
La financiación del estadio de Brasilia sale exclusivamente de las arcas del distrito federal, lo que significa que cada centavo es de los contribuyentes. El informe de los auditores encontró casos de lo que parece ser una sobrefacturación flagrante.
Por ejemplo, indica que el transporte de las gradas prefabricadas debía costar sólo 4.700 dólares, pero el consorcio constructor facturó al gobierno 1,5 millones de dólares. El consorcio está formado por Andrade Gutierrez, un conglomerado de construcción, y Via Engenharia, una firma de ingeniería.
FIFA.MENSAJE A AFICIONADOS
“Pueden esperar un gran campeonato”
El secretario general del organismo rector del futbol, Jerome Valcke, aseguró que el nivel futbolístico del torneo será excelente
PARÍS.-El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, aseguró que “los aficionados pueden esperar un gran campeonato” en el Mundial de Brasil-2014 (del 12 de junio al 13 de julio), según una entrevista difundida a través de la web de la Federación Internacional.
Los aficionados “pueden esperar un gran campeonato”, declaró el número dos de la FIFA durante la entrevista concedida cuando queda exactamente un mes para el inicio del campeonato.
“Eso es en lo que estamos trabajando”, añadió Valcke, que aconsejó a los seguidores que tengan previsto viajar a Brasil que organicen su viaje de antemano “para evitar tomar decisiones en el último momento”, ya que Brasil es un país muy grande.