COLIMAMEDIOS
Fuente|DiarioAvanzada
Colima, México (05 de agosto de 2013).- Con una falta de política pública efectiva en materia de desarrollo económico que mejore la calidad de vida de los ciudadanos, Colima enfrenta una grave crisis económica no sólo en su gobierno, sino también entre los ciudadanos, no en vano se colocó como el estado con mayor crecimiento de la pobreza extrema, sostiene el diputado local y economista Francisco Rodríguez García.
De acuerdo con el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) del Inegi, que muestra la tendencia del PIB estatal, Colima es el segundo estado con la mayor baja en el periodo, con un descalabro cuyo descenso es de 2.1 por ciento. El estado mostró una fuerte contracción en sus sectores de maquila y manufactura.
Pero la administración de Mario Anguiano Moreno no tiene intenciones de atraer más inversiones para contrarrestar el problema, advierte el legislador perredista, «tenemos un gobierno que se endeuda para gasto corriente, o para que los ‘corrientes se lo gasten’; pero realmente no vemos un endeudamiento del gobierno para hacer una inversión en desarrollar la infraestructura necesaria para atraer el avance de la industria en la entidad”.
Expone que lo último que se conoció y quedó sólo en un intento fue el tema de la Corona, «de ahí no hemos sabido nada», pondera al insistir en la necesidad de crear los mecanismos necesarios para atraer más inversión al estado, de lo contrario podría convertirse en un lugar sólo de paso.
El mismo puerto Manzanillo no tiene un plan efectivo, tiene una orientación en tres o cuatro sentidos que no se encuentra en una unificación de una planeación adecuada, explica, «tenemos el tema de la termoeléctrica, del puerto, del turismo y del comercio; pero la verdad no hay una planeación como un polo económico que puede ser Manzanillo.
«Entonces está carente una política de largo o mediano plazo en donde el gobierno invierta en infraestructura pública mínima necesaria para poder establecer eso», añade Francisco Rodríguez al subrayar que de seguir en la misma dinámica el estado se podría convertir en otro Tijuana.
Además de por la inseguridad, indica, porque hay una carencia total de una política de desarrollo económico en el estado, «no hay una planeación, por ello Colima se podría convertir en una especie de colonia o traspatio de los grandes polos de desarrollo como puede ser el propio Guadalajara. Podría ser al paso de los años otro Tijuana», concluye.
Además de los recientes resultados del ITAEE que hablan de la desaceleración de la economía local en maquila y manufactura, los últimos meses del año pasado mostraron una caída de casi 8 puntos en las actividades relacionas con la agricultura, ganadería y pesca en Colima.